Desde hoy hasta el próximo 23 de marzo el Palau de la Música Catalana da cabida a la exposición “Louise Bourgeoise: La sage femme”. La muestra, ubicada en la Sala Lluís Millet, consta de 26 grabados, 2 esculturas, un dibujo y un gouache, así como un libro de bibliófilo situado en uno de los balcones del Foyer, acompañándose además de la proyección The Spider, the Mistress and the Tangerin, un documental sobre la vida de la artista que se proyecta en la Sala de Ensayo del Orfeó Català. Comisariada por Maria Fluxà, Marta Salleras y Víctor Garcia de Gomar, esta exposición es una de las principales iniciativas a lo largo  de la temporada a la búsqueda del diálogo entre la arquitectura modernista del Palau con otras artes plásticas.

La treintena de piezas, la mayoría de ellas procedentes de la colección de Maria Fluxà, proponen un viaje al interior de la vida y el imaginario de Louise Borgeois (1911-2010), verdadero icono del arte moderno. Bourgeois es conocida por sus esculturas e instalaciones, aunque la semilla de su trabajo se encuentra especialmente en la escritura y el dibujo. Este último desempeña un papel esencial en los grabados, no solo como punto de partida, sino como vehículo de transformación y desarrollo de sus iconografías. Seguir el hilo de sus dibujos y grabados que muestra la exposición permite aproximarse a muchos aspectos de su andadura creativa. “Dibujo impulsivamente a cualquier hora del día o de la noche para exorcizar mis miedos,  empleo el arte como vehículo de descarga emocional.” L. B.

Sobre la obra de Louise Bourgeois (texto: Maria Fluxà)

La obra de Louise Bourgeois es profundamente autobiográfica. Comunica sus experiencias personales, las relaciones afectivas amor-odio, estrechamente vinculadas a su memoria emocional. Son los motores de su creatividad. Dichos lazos fundamentales van y vienen en toda su obra de una forma recurrente y, no obstante, estas raíces emotivas que la artista profundiza en su universo simbólico y psicológico, íntimo, conectan a la perfección con los sentimientos de un gran número de personas.

Su obra no es lineal, es una artista muy versátil, muy libre. Expone sus miedos y temores con el fin de dominarlos. Es irónica y mordaz, aunque también puede ser muy tierna. Posee espíritu combativo y feminista, sin que ello suponga la pérdida de su valiosa individualidad ni la sumisión a ninguna línea ideológica. Su trabajo refleja la dualidad de la interiorización del mundo en el cuerpo y la proyección de su mundo interior y de sus experiencias personales. El arte como oscilación interior-exterior. Para ella, “el arte es una garantía de salud mental”.

El diálogo con las artes plásticas

Desde hace dos temporadas la Fundació Orfeó Català-Palau de la Música Catalana ha iniciado diferentes iniciativas para fomentar el diálogo entre la arquitectura modernista del Palau y las demás artes plásticas. Después de la experiencia con Antoni Tàpies la pasada temporada, y con Bill Viola dos temporadas atrás, el presente año el Palau se propone esta búsqueda desde una perspectiva femenina. La exposición de Louise Bourgeois es la primera de tres experiencias que presentan como hilo conductor a tres indiscutibles artistas   de los siglos XX y XXI: Bourgeois, Eulàlia Valldosera y Pina Bausch. A través de la obra de estas tres mujeres, el Palau ofrece a su público un viaje que revela sin pudor el mapa íntimo del proceso de creación artística que pivota entre las cicatrices de la vida y la exaltación de las emociones más recónditas.

Cómo visitar la exposición

• Con la compra de entrada de visita guiada, de 10 a 15.30 h
• Con la compra de entrada de concierto, dentro del período de la exposición
• Sábados y domingos del 1 al 23 de marzo, de 16 a 20 h (incluye la proyección del documental The Spider, the Mistress and the Tangerine). Precio: 3 €